Cualquiera puede ser vegana

Nos estamos despidiendo mentalmente de Londres y queremos ir comiendo en algunos de nuestros lugares favoritos antes de irnos.

Corre el hashtag que dice #anyonecanbevegan (cualquiera puede ser vegana) que es para decir algo que hacías antes de ser vegana que parecía muy importante o muy difícil de dejar de hacer pero que en realidad al final no lo fue.

Mi pareja podría decir: “Durante mucho tiempo cada viernes iba a comer kentucky fried chicken y el pollo frito era una de mis comidas fast food preferidas (como buen londinense, con puestos de pollo frito por todas partes) y ahora soy vegano”.

Mi pareja se hizo vegano antes de conocer las increíbles opciones veganas que nos esperaban. No fue difícil dejar de comer pollo cundo supo lo que se esconde detrás de la industria del pollo. Pero menos difícil cuando apareció en Londres Temple of Seitan, el primer puesto de no-pollo frito, 100% vegano, hecho con seitán. Nos acordamos de cuando abrieron el primer puesto en Hackney, donde se formaban larguísimas colas (tanto que se acababa la comida y tenían que cerrar hasta el día siguiente) y luego abrieron un segundo en Camden.

Si no existe algo así en vuestra ciudad, lo podéis hacer en casa: es seitán rebozado con las especias adecuadas y satisface todos los antojos por el pollo frito. SIEMPRE hay una versión vegana para cualquier plato!

Si estáis en Londres y vais al Temple of Seitan de Camden, podéis comerlo en el canal, como nosotros, o muy cerca, en Granary Square y Coal Drops Yard, una maravilla estética.