El otro día leía esta noticia, con el título “Empatía hacia los animales en la prevención del acoso escolar”1: un grupo de profesionales de la Enseñanza presentaron en el Congreso de los Diputados un documento sobre la necesidad de incluir la empatía con los animales en el currículo y las estrategias escolares.
Parece ser que “hace una semana”, en un un acto en el Congreso de los Diputados2 organizado por la Asociación de Parlamentarios en Defensa de los Animales (APDDA), se presentó el documento “Educación para la empatía hacia los animales como estrategia de prevención del bullying escolar”, coordinado por Profesionales para la Defensa Animal (Proda).
En seguida voy a mirar la fecha en que está escrita esta noticia y veo que es de marzo de 2017. La pregunta que me hago al instante es:
¿Cómo ha quedado esa propuesta? ¿Se aprobó? ¿Los colegios enseñan empatía como parte del currículo?
Voy a la página de APDDA y encuentro en la sección de sus iniciativas parlamentarias3 la proposición no de ley presentada en octubre de 2017 sobre incluir la empatía hacia los animales en los contenidos educativos en la enseñanza obligatoria, dice así:
«El Congreso de los Diputados insta al Gobierno a establecer los mecanismos necesarios para que en la próxima modificación legislativa que se lleve a cabo con afectación en materia de Educación, se introduzcan en el currículum escolar de enseñanza obligatoria, y especialmente en el segundo ciclo de educación infantil, primaria, secundaria y formación profesional, contenidos educativos en la empatía hacia los animales para prevenir, evitar e intervenir en conductas violentas hacia humanos.» Palacio del Congreso de los Diputados, 27 de octubre de 2017, Joan Mena Arca, Diputado, Francesc Xavier Domènech Sempere, Portavoz del Grupo Parlamentario Confederal de Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea4.
Pero no encuentro si esta medida por fin se está aplicando a día de hoy. Las últimas noticias que hallo son de enero de 2019, en Europa Press5, en que parece que los grupos parlamentarios socialista, de Unidos Podemos y Ciudadanos, con el apoyo de Esquerra Republicana (ERC) y Compromís, registraron en el Congreso una proposición no de ley en la que piden al Gobierno que incluya la empatía y el respeto a los animales en el currículum escolar. O sea, lo mismo, casi dos años después. Ya se sabe que las cosas de palacio van despacio pero parece que está iniciativa se queda en nada más que eso. Hay noticias sobre ella desde 2017 y no se concluye nada a día de hoy (finales de 2019).
Y me da mucha lástima que pase el tiempo y se dejen de lado cosas tan importantes. Estamos perdiendo años, niños y niñas que crecen sin beneficiarse de esos valores, con las consecuencias futuras nefastas. En la infancia es donde se pueden hacer más cosas, que tendrán una gran repercusión en el mundo presente y futuro. Hace años que me he dado cuenta de la conexión entre el trato que les damos a los animales y la violencia que hay en el mundo. Y luego he podido confirmar mi intuición al encontrar tantísima bibliografía, ensayos y estudios hechos por expertos en psicología, educación, pedagogía, sociología y criminología sobre esta relación.
Estrecha relación violencia contra los animales y la violencia interpersonal
“Una educación en la empatía hacia los animales puede promover una cultura de paz entre los humanos.”6
Por ejemplo, la psicóloga Mariví Vaquer, presidenta de Proda, subrayó en el Congreso “la estrecha relación que existe entre la violencia ejercida contra los animales y la violencia interpersonal”, constatada ya en numerosos estudios7. El maltrato animal abre la puerta a cualquier otro tipo de maltrato y violencia. A la vez, los mismos estudios, han demostrado que los niños que conviven con animales, que aprenden a respetarlos, que les ven como seres sintientes, tienen más empatía con los otros niños y tienen más autocontrol de sus emociones. Todo ello refuerza su inteligencia emocional.
Más datos que tendrían que hacernos despertar a todos, especialmente padres y educadores que tenemos el desarrollo de nuestros pequeños en nuestras manos, es que el acoso escolar va en aumento. Una cuarta parte del alumnado sufre o ha sufrido acoso, burla y exclusión, son datos proporcionados por la vicepresidenta de Proda, Esperanza Otero. La relación con todo lo que decía antes es que los niños que no desarrollan su empatía pueden canalizar su ocio hacia diversiones que implican sufrimiento de alguien (animales y personas).
“Enseñar benevolencia y compasión es el gran reto del futuro”, afirmó Otero.
Maltrato por placer versus maltrato “por necesidad”
Hay un experimento que realizó Albert Bandura, psicólogo y teórico del aprendizaje social, en que la profesora les enseña a los niños un muñeco y les dice que es bobo y que por eso se le puede golpear8. Ella lo hace y los niños imitan sin más. Lo mismo sucede con una persona disfrazada de payaso.
Esto se extrapola al trato que damos a los animales. Los casos más visibles y con los cuales una gran mayoría de la población empatiza y, por tanto, condena es la violencia explícita a los animales: maltrato por placer, por diversión, o por no conocer otra manera, como puede ser golpear a un perro o a un caballo, la tauromaquia, las fiestas con animales a los que se agrede o abusa. Bastante gente considera que todo eso es incorrecto, porque no es necesario, o se hace “por placer” o “por maldad”, y, por tanto, creen que son denunciables. Pero qué pasa cuando el maltrato se comete contra esos animales llamados y considerados “de granja” y suceden en un lugar cerrado, no tan visible o totalmente escondido (las granjas, los mataderos, en las cocinas). Entonces se considera que es normal y necesario, pues las personas necesitan consumir animales, es nuestra tradición, nuestra cultura, etc. No se considera que sea maltrato, ni que se hace por placer, sino por necesidad.
Las personas que luchamos contra el maltrato de los animales y por su liberación, no vemos diferencia. Los animales “de granja” son animales igual. ¿O es que por ser “criados para” les convierte en una máquina, en una cosa, en un recurso, les elimina la capacidad de sentir, de tener dolor, de sufrir? Eso es exactamente lo que se nos hace creer des de bien pequeños y es tan solo un mecanismo de defensa para poder consumir animales. Porque si pensáramos más allá, veríamos que no hay ninguna diferencia en cuanto a capacidad de sentir entre un perro y un cerdo, entre un gato y un conejo, entre un periquito y un pollo. Veréis que he puesto en la comparación en primer lugar un animal considerado doméstico, al cual solemos amar y velar por su bienestar, y en segundo lugar animales que se tratan como mercancía, como ingredientes, los que sufren una vida miserable y acaban su vida de manera horripilante.
Como tantas otras veces, lanzo algunas preguntas, ¿dónde está la línea?, ¿quién las traza? En China también hay industria de perro y gato para el consumo, en muchos países de Europa y en Estados Unidos comer conejo es impensable (es un animal de compañía), o los crustáceos dan grima a muchas personas (una amiga alemana me dijo que no podía entender cómo los españoles pueden comer gambas pues para ella son como grandes insectos marinos). Sí, a las gambas les podemos llamar “cucarachas marinas”, pues tanto los crustáceos como tantos insectos son animales invertebrados dotados de un esqueleto externo y apéndices articulados.
En definitiva, la línea la traza la cultura, la tradición y, al final, las personas individualmente. Por ejemplo, mi familia nunca ha sido de comer caracoles, sin embargo tengo muchos amigos para los cuales es un manjar. Los caracoles son tradición en la gastronomía catalana pero a nosotros siempre nos han dado asco. Lo mismo con el conejo.
Hacer excepciones a la empatía y la compasión tiene repercusiones nefastas
¿Adónde quiero llegar con todo esto? Pues a conectarlo con lo que hablaba antes. Hacer excepciones a la regla de la empatía y la compasión es muy peligroso. Cuando decimos que está bien matar ciertos animales porque son para el consumo estamos haciendo una excepción sobre la regla número uno de la empatía que es “no harás daño a los demás”. Además, cuando se une a todo esto el no saber exactamente dónde delinear esa diferenciación porque esta depende de donde vivas, de tu cultura, de tu familia y, al final, de tus gustos personales provoca disociación y confusión en las personas y, por supuesto, en los niños pequeños en edad de desarrollo y aprendizaje entre lo que está bien y lo que está mal.
Comer animales no es necesario para la vida de los humanos, así lo demuestran estudios antropológicos y sobre fisiología humana, el ser humano es por naturaleza herbívoro9. Comer carne tiene que ver con mecanismos de adaptación para la supervivencia en épocas en que faltaban los alimentos vegetales, especialmente cuando los humanos se alejaron de sus tierras de origen (los trópicos) y tuvieron que adaptarse a los nuevos climas fríos.
También lo demuestran estudios científicos de total actualidad10, que demuestran que una alimentación 100% vegetal bien planificada y variada, es equilibrada y saludable para todas las épocas de la vida, desde la población infantil, hasta las mujeres embarazadas y a los deportistas profesionales.
Empatía con los animales – empatía con las personas vulberables
Volviendo al artículo de eldiario.es, Vaquer habla de la biofilia, que se refiere al vínculo emocional innato en los humanos hacia los demás seres vivos. Se ve que con los animales, desarrollamos la empatía desde los primeros momentos, con lenguaje no verbal; así, posteriormente, generalizamos esa empatía hacia los miembros de nuestra propia especie.
Aprender a respetar desde niños a aquellos más vulnerables, que no se pueden defender, que no hablan el mismo lenguaje (al menos no el lenguaje verbal), siembra la base de la construcción de la capacidad de sentir compasión por otras personas vulnerables, más débiles, diferentes, de distintas culturas, razas, clases. Parece que ser empático con los animales tiene pues grandes beneficios pues fomenta la no discriminación, la expresión de la afectividad, la resolución de conflictos sin violencia, el autocontrol de la impulsividad y la agresividad, la igualdad, el respeto.
“El aprendizaje de las capacidades, las habilidades y las competencias que conforman la inteligencia emocional son imprescindibles en una educación para la convivencia, la paz y el equilibrio entre personas”, insiste Proda.
Pero, ¿qué pasa en las escuelas?
Sin embargo, en las escuelas nos encontramos que el material educativo cosifica a los animales. Desde pequeños aprendemos que las vacas «dan» leche o las gallinas «dan» huevos”, nos enseñan los nombres de todas las partes en las que se despieza un cerdo y, con orgullo, nos dicen que del cerdo “se aprovecha todo”. Parece que así no harán sentir mejor sabiendo que, al menos, no se ha desperdiciado nada y que esa muerte está totalmente justificada. Chema Lera, maestro de escuela, trabaja la empatía en todas su clases, haciendo preguntas a los alumnos que les inciten a su propio razonamiento y conclusiones.
«Si logramos despertar su empatía de pequeños, sembraremos la semilla para que sean adultos solidarios», Vaquer.
Sí que van surgiendo iniciativas en España relacionadas con la educación en el respeto a los animales, pero la mayoría se quedan en anécdotas puntuales y sin continuidad por falta de recursos. Por eso hace falta que se introduzcan en el currículum escolar de enseñanza obligatoria (desde infantil, primaria, secundaria y formación profesional).
Hacer que todo este trabajo de la empatía se haga realidad requiere de una formación específica para los educadores y de la implicación de los padres. Como las leyes tardan en materializarse y ponerse en práctica, animo a que lo adoptéis cada una de vosotros a título personal, al menos de momento, desde nuestras prácticas individuales y cotidianas, seamos profesores, madres/padres o personas que estamos cerca de niños y niñas.
1 “Empatía hacia los animales en la prevención del acoso escolar”, en el diario.es en la sección de “El caballo de Nietzsche”, por Concha López: https://www.eldiario.es/caballodenietzsche/Empatia-animales-prevencion-acoso-escolar_6_618098214.html
2 Acto en el Congreso de los Diputados, «Educación en la empatía hacia los animales como estrategia de prevención del bullying escolar», en febrero de 2017, http://www.apdda.es/p/blog-page_8.html
3Iniciativas parlamentarias de APDDA: http://www.apdda.es/p/iniciativas-parlamentarias_13.html
4BOE de 14 de noviembre de 2017, p. 27 y 28: http://www.congreso.es/public_oficiales/L12/CONG/BOCG/D/BOCG-12-D-247.PDF#page=26
5 “PSOE, Unidos Podemos y Ciudadanos quieren que la empatía y el respeto por los animales se enseñe en los colegios”, en Europa Press, en enero de 2019: https://www.europapress.es/sociedad/educacion-00468/noticia-psoe-unidos-podemos-ciudadanos-quieren-empatia-respeto-animales-ensene-colegios-20190106110234.html
6BOE de 14 de noviembre de 2017, p. 27 y 28: http://www.congreso.es/public_oficiales/L12/CONG/BOCG/D/BOCG-12-D-247.PDF#page=26
7 “Empatía hacia los animales en la prevención del acoso escolar”, en el diario.es en la sección de “El caballo de Nietzsche”, por Concha López: https://www.eldiario.es/caballodenietzsche/Empatia-animales-prevencion-acoso-escolar_6_618098214.html
8 Experimento del muñeco Bobo, realizado por Albert Bandura, en 1961 y 1963: https://es.wikipedia.org/wiki/Experimento_del_mu%C3%B1eco_Bobo. No solo este experimento muestra que los niños que estuvieron expuestos al modelo agresivo fueron más agresivos con el muñeco, sino que además se añaden diferencias por género, siendo los niños más agresivos que las niñas y también habiendo una estrecha relación entre la agresividad y el sexo de la persona modelo que ejercía agresividad. Un modelo masculino agresivo provocaba las más altas reacciones agresivas por parte de los niños varones.
9Podéis leer un documento titulado «Los seres humanos somos herbívoros”, traducción del documento original en inglés, en ADAPTT (Animals Deserve Absolute Protection Today and Tomorrow), de Gary Yourofsky, http://www.adaptt.org/archive/humans-are-herbivores-spanish.pdf
10Os dejo un recopilatorio de reseñas de estudios científicos sobre la relación salud y alimentación, concretamente la relación entre vida saludable y alimentación vegetal y entre enfermedad y consumo de productos animales, en la página de la Unión Vegetariana Española: https://unionvegetariana.org/resenas-estudios/